Cuando comencé a hacer la guitarra mi primera idea era pegar en la tapa una chapa de arce rizado, pero las pruebas que hice no salieron nada bien y la chapa se rajaba, por lo que descarté la idea.
Pero llegados aquí y a última hora, justo antes de dar el tinte, finalmente me decidí a intentarlo.
Las chapas deberían estar pegadas antes de poner las cenefas y antes de abrir los huecos, así que para pegarlas necesitaba ahora llenar los huecos que previamente había vaciado
Para que las chapas hagan bue contacto por toda la superficie había pensado prensar con unas planchas de poliestireno, pero las pruebas no salieron bien, eran muy rígidas y no cedían lo suficiente para adaptarse al cuerpo, también pensé en colocar un saco de arena encima y luego prensar, pero me preocupaba que con la presion se rompiese el saco y de esparramara toda la arena. Por eso no había pegado todavía la chapa. No estaba convencido de poder hacerlo bien. Pero entonces me encontré esta plancha de gomaespuma y me pareció que podría dar buen resultado, es lo suficientemente rígida para hacer presión, pero al mismo tiempo se adapta a la superficie irregular
Y ahora a dar cola
Se colocan las chapas encima y para que no se muevan al prensar pongo unas grapas en los tacos que coloque en los huecos
El resultado es bueno.
Buen contacto por todo
Pero como la tapa de la guitarra no es lisa la chapa no da de sí y raja por la parte más cóncava
Y reparo las grietas con unas tiras de madera y cianocrilato
Paso una lija fina
Abro los huecos de los potenciómetros
El no haber pegado la chapa en su momento ha condicionado que el trabajo sea bastante flojo.
Ahora doy el tinte.
Una mano de tinte amarillo
Ningún comentario:
Publicar un comentario